¿Qué es?
El ácido salicílico es un betahidroxiácido (BHA) muy utilizado en el cuidado de la piel por sus propiedades exfoliantes, antiinflamatorias y antiacné. Penetra profundamente en los poros para disolver el exceso de grasa y las células cutáneas muertas, lo que ayuda a eliminar y prevenir los brotes. Conocido por su eficacia en el tratamiento del acné, los puntos negros y los puntos blancos, el ácido salicílico es un producto básico en muchas rutinas de cuidado de la piel.
¿De donde viene?
El ácido salicílico se deriva de la salicina, un compuesto que se encuentra en la corteza de los sauces (especie Salix) y otras plantas. También se puede producir de forma sintética para su uso en productos cosméticos y farmacéuticos. El ácido se refina y purifica para garantizar su eficacia y seguridad en las fórmulas para el cuidado de la piel.