¿Qué es?
El levulinato de sodio es una sal sódica del ácido levulínico, un ácido orgánico natural. Se utiliza habitualmente como conservante en productos naturales y orgánicos para el cuidado de la piel como una alternativa más segura a los conservantes sintéticos, en consonancia con las tendencias de belleza limpia. El levulinato de sodio es valorado por sus propiedades acondicionadoras de la piel y su capacidad para mejorar la eficacia de las fórmulas, a la vez que proporciona beneficios hidratantes y antimicrobianos.
¿De donde viene?
El levulinato de sodio se deriva del ácido levulínico, que normalmente se obtiene de materiales vegetales renovables. El ácido levulínico se produce mediante la hidrólisis ácida de la celulosa, un componente de las paredes celulares de las plantas. El proceso implica la descomposición de la biomasa, como el maíz, la caña de azúcar o la madera, en sus componentes de azúcar, que luego se convierten en ácido levulínico. Posteriormente, este ácido se neutraliza con hidróxido de sodio para formar el levulinato de sodio.